Ayer terminé la lectura de mi libro: "Perdida en su memoria" de Mary Higgins Clark. Es el primer libro que leo de esta autora y, bueno, no está mal. A mi madre le encanta, me lo recomendó varias veces hasta que, finalmente caí. Siempre acostumbro leer al menos un par de libros para decidir si un autor me gusta o no (salvo excepciones como Umberto Eco que, sólo leer dos frases de "El nombre de la rosa" me atrapó). No es que estuviera mal, pero es estilo película americana de asesinato, casi predecible, y demasiados personajes, tantos que tenía que estar contínuamente volviendo hacia trás para recordar quién era cada uno.El final, sorprendente eso sí. Comencé una lectura nueva, "Yo, Julio Verne" de J.J.Benítez. Estuve a punto de cambiarlo por otro, pero comencé a leer y, antes de llegar a la introducción,me paré en lo siguiente:"Puede que el lector considere este libro como un juego o una ensoñación de su autor.Se equivocará y acertará a partes iguales.¿O es que hay algo más real que los sueños?".Inevitablemente, esto me obligó a pararme unos instantes y repetir mentalmente la frase.Luego,continué leyendo y me dí cuenta de que había hecho bien no cambiando de libro. ¿Acaso no recordaba que lo que me divierte de Benítez no es lo que cuenta sino cómo lo cuenta?.Su manera de relatar y su obsesión acerca de la "causa-lidad" que no "casualidad" me ha hecho pasar buenos ratos. He leído multitud de libros suyos, desde los famosos "Caballos de Troya" hasta "Al fin libre" y otros tantos. Mi padre díce que se trata de un loco, que qué casualidad que las historias más fantásticas siempre las protagoniza él. Y, yo, en eso, estoy de acuerdo, la verdad es que dificil, muy dificil creer en los hechos que narra. Pero aún así, no sé qué resultaría más increíble si que realmente los hechos fueran verdad o que sólo se trate de productos de su imaginación. Sea como fuere, ¡es un genio!. J.J. Benítez se empeña en creer que todo, absolutamente todo lo que nos ocurre es fruto de LA PROVIDENCIA, todo cuanto te rodea son mensajes que haz de saber interpretar y, hasta lo más absurdo tiene un motivo que no obedece a la simple casualidad.Yo, a diferencia de Benítez, sí creo en la casualidad. Es bonito buscar una respuesta a todo cuanto nos sucede, pero algunos hechos que me han ocurrido a lo largo de la vida resultan tan extraños que sí los achaco a mera casualidad, no creo que tengan relevancia. O quizás, es que no he sabido interpretar los mensajes.
martes, julio 24, 2007
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
2 comentarios:
No he leído nada de Benitez, son tan apasionantes como dices?
No es el típico libro que yo recomiende a nadie por eso mismo. Porque son extraños. El autor suele elegir diferentes temas: sobre ovnis, religiosos, sobre un personaje histórico. A mí, en realidad lo que más me gusta es que me hace gracia su manera de "hablar", y siempre es curioso como trata las "casualidades".Está enc ontra de la casualidad, piensa que todo, absolutamente todo está escrito, que todo tiene una razón de ser y quiere ver mensajes en todo cuanto le sucede. Y cuenta todo como si estuviera hablando contigo allí mismo, en lenguaje coloquial, tiene unos golpes de gracia por lo natural que es. En ocasiones te hace pensar. Pero ya digo, nunca es un libro que yo recomiende porque Benítez es un tipo raro, más fácil de tomar por loco que otra cosa. ES que es dificil creerse las cosas que cuenta.
Publicar un comentario