viernes, febrero 15, 2008

Tras la "resaca" de San Valentín...

...todo sigue igual. Ya dije que para mí San Valentín es un día más. Fechas señaladas son su cumpleaños, el día que le conocí, el día quese inicia algo importante para él. No un 14 de febrero. Considero que toda excusa es buena para reunirse la gente que se quiere y darse cariño, pero San Valentín es diferente. Me repele especialmente por un motivo y es que, la concepción que yo tengo de la pareja es tan diferente a la que tienen muchos. Y por ello me choca la actitud de muchas mujeres. Para mí la otra persona no es una cosa que se posee. Se quejan los hombres de que las mujeres somos unas mandonas y me pone de los nervios presenciar escenas en las que compruebo que, efectivamente, están en lo cierto. Y yo soy mujer. No basta con que una persona te atraiga físicamente (para la pareja y el matrimonio digo), no me sirve de nada que mi pareja me haga un regalo porque durante una semana le he estado dando la tabarra con qué me iba aregalar por San Valentín, o que se prive de salir con sus amigos bajo amenaza de que si lo hace aguantará mis caras largas durante un mes. Muchos no son conscientes de que en el matrimonio hay vida más allá de la luna de miel, y luego claro pasa lo que pasa. Contemplo como muchas chicas dominan a su pareja como niñas malcriadas a su osito de peluche. Les veo una actitud tan egoísta, tan egocéntrica, narcisista. Tratan a sus chicos como si fuesen subnormales solo por ser hombres. Comparándome con ellas, me considero rara. Para mí la pareja implica complicidad, pariticipación, confianza, compartir cosas, ceder en favor del otro, un poco de sacrificio, pero nunca esclavitud. Jamás le prohibiría a mi pareja salir con sus amigos. Para que una relación sea sana, es necesario que cada uno reserve un pequeño espacio para sí mismo. Para mí es imprescindible que él se sienta libre, que esté conmigo porque quiere, que hable y actúe sin temor a llevarse una bronca por mi parte. ¡Soy su compañera, no su dueña ni su jefa!. Quiero a mi lado a una persona, no a una marioneta. Le pido que compartamo un proyecto en común, es importante compartir objetivos en la vida o, al menos, que respete los míos. De nada exterminar los deseos, los objetivos del otro con la excusa de que lo hará porque te quiere. Además, ¿cómo encaja eso de que a la persona a la que más quieres le prohíbas algo, le liquidas sus ilusiones, las pequeñas cosas que le hacen feliz? ¿Cómo se compagina el amor con la amenaza, con el castigo, con la presión, con las broncas gratuitas, con las caras largas? Esas son cosas que no entiendo. Decía Chateaubriand que "El hombre feliz el que encuentra una mujer que sea a la vez amante y buena compañera". Y el autor de un blog al que sigo anónimante desde hace un tiempo escribe lo siguiente: "La mujer de tu vida es la que está estrechando la mano mientras te estás muriendo". Yo añado lo mismo respecto del hombre de mi vida. Y, al mismo tiempo me sigiere una pregunta, ¿tan dificil es encontrar una mujer así?

1 comentario:

Anónimo dijo...

Si Tambien !Pero Tambien dibujo cosas como Flores y todo eso .

Gracias por El Comentario.Y
un beso muy Grande Cristina .:-)