martes, abril 01, 2008

Hay frases que animan siempre. Sin embargo nos gustaría que hubieran sido pronunciadas por una persona distinta. Es el ejemplo: esta mañana mi amiga Virginia me ha repetido por ¿centésima vez? en el tiempo que llevamos de compañera la siguiente frase: "Gracias. Yo no sé lo que haría sin tí". Simplemente porque le he facilitado algo que ella necesitaba. Debo sentirme afortunada porque ya me ha pasado otras veces, y yo, sinceramente no considero que sea para tanto. Virginia, Isabel, Alejandra, Rafa...son personas con quienes un día coincides por casualidad y casi de repente se convierten en un pilar de tu vida importante. Amigos con quienes compartir, a quien acudir, amigos con los que sabes que, si desapareces durante un espacio pequeño de tiempo ya están llamándote para saber " tú en dónde estás metida, que no das señales de vida". Amigos que sabes que puedes no verlos mucho pero siguen tan cercanos como el primer día. Hoy he sonreído como otras veces con esta ocurrencia de mi amiga, pero cómo me gustaría que una frase como ésa me la hubiera otra persona:"Yo no sé lo que haría sin tí"...cómo me gustaría...
(...)
Malgrat la llunyania, el meu cor es a prop teu,amor meu.

http://www.fotolog.com/terrybd

1 comentario:

erMoya dijo...

Ufff, como te entiendo...
Es como cuando le cuento mis fracasos amorosos a mis buenas amigas, siempre me dicen algo así como "no te preocupes, pero si tu eres mu guapo" y yo aunque no lo digo pienso algo así como: "no me importa que eso lo pienses tu, sino que lo pensase X persona..."
...

En fin... Besos!