"Aquel que más posee, más miedo tiene de perderlo." Leonardo Da Vinci

Supongo que eso es algo que suele ocurrir. Puede que esa sea el motivo de que últimamente mi corazón y mi cabeza vayan por senderos diferentes. Al contrario de lo que resulta más habitual, no es que sueñe y mi razón me devuelva a la realidad. Ahora que podría disfrutar de licencia para dulces sueños porque al fn y al cabo el hombre es un animal soñador (así nos hizo el Creador, reciba el nombre que reciba para cada uno), es mi corazón el que sufre de constantes pesadillas. El diálogo que mantengo conmigo misma es más que pintoresco: -"Pero sonríe caramba! que tienes motivos. Ahora que puedes no lo vas a aprovechar". Y me cuesta. Me cuesta sonreir. Es extraño, el saco de mis esperanzas ha llegado a estar vacío y ahora que va más lleno de lo que ha estado nunca, no la siento. ¿El culpable? El miedo. Un miedo supersticioso a creer que, si me atrevo a soñar, dspertaré del sueño y éste se romperá estrepitomanete en mil pedazos. Y esta manía mía de no querer que nadie sufra. No se puede ser tan buena...(tan tonta). Y no se puede ser tan buena (perdón, tan tonta) porque los demás no son tan buenos como eres tú y al final, adivinen quien paga los platos rotos. Hay personas que, en los disntintos ámbitos de la vida son muy lanzadas, yo no soy de ésas. Ójala me resultase tan fácil tomar decisiones. Hay personas que yo, incluso dude de que tomen decisiones, simplemente se lanzan y cómo caigan cayeron. En la vida hay que apostar, en eso estoy de acuerdo. Quien no arriesga no gana, con esto estoy de acuerdo también. Pero también es cierto que determinadas personas muy "aventureras", las que siempre van a por todas, las que siempre juegan sin importarles nada más, en realidad valoran muy poco aquéllo que tienen. El valiente es el que sabe sobreponerse al miedo. La vida hay que "vivirla", quién no saborea los riesgos el ganar y perder no "vive". Es verdad. Pero hay ciertas cosas en las que mi cobardía, mis ratos de angustia y de dudas es precisamente porque ...me importa demasiado. Lo valoro demasiado como jugármelo al doble o nada. Y cualquier paso que pueda dar me lo pienso una y mil veces. Ese es el inconveniente de saber valorar, de que algo o alguien te importe demasiado....Ahí está la diferencia.
(...)

AIRELIBRE; ¿Qué tal va el libro?

A todos: Gracias!!! :)

http://www.fotolog.com/terrybd/35147061